9. UNA HERRAMIENTA VALIOSA, NO UN SUSTITUTO. Lo que debemos enseñar a nuestros hijos y alumnos es a usar bien la IA, sin convertirla en un oráculo ni en un sustituto afectivo. Y para ello hay que acompañarlos. - Educar su pensamiento crítico, explicarles qué puede y qué no puede hacer la IA, ayudarles a distinguir entre un dato y un consejo, entre una respuesta estándar y un acompañamiento real, entre algo que da una información estructurada y alguien que puede visitarte en el hospital cuando estás enfermo.