6. El narcisista no tiene fuerza para ser y las relaciones personales acaban siendo un campo de batalla. Carece de entusiasmo, predomina en él la autocompasión y el sentirse víctima de las circunstancias. No se toma nada en serio y como consecuencia de ello, los ideales quedan relativizados y carece de fuerza para llevar a cabo ningún proyecto. EL NARCISISMO